Onírico reencuentro

Las calles pubescentes se exhiben desiertas
impúdicamente desnudas
bajo un cielo de luna discreta
noche velada de párpados clausurados

Un viento gélido que arrecia tu recuerdo
recorre mi piel asfaltada
onírico escalofrío de enfermizo insomne

Encuentros quiméricos
en la quietud de un lago somnoliento
que refleja celeste tu mirada
tan nítida que enarbola arrinconados sentimientos

Arden perversos los candiles del desvelo
y allá fuera no existes
rostros sin nombre desfilan ceremoniosos
ojos extraños que atónitos me examinan
que no me conocen
a los que no reconozco

Se manifiestan abarrotando de tedio
las lumínicas arterias principales de mi añorada morada
eclipsando tu ansiada presencia
y me rindo al desencuentro
rabietas infantiles de malogrado escondite

Regreso abatido al destierro
a la pegajosa humedad de regusto salado
al traje encorsetado que asfixia la inspiración
al juez que me condenó a mudarte en sueño.

Comentarios

Entradas populares de este blog

retales del pasado (I)

ánimas de luna nueva

treinta y tres